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Pocos son los casos que hemos escuchado decir de demandas contra personas que hagan uso del Internet para descargar canciones o películas. Tal vez pensemos que eso nunca sucede pero la realidad es diferente, los derechos de autor son más complejos de lo que uno cree y se pueden ir hasta los extremos para hacerlos valer.
Se está intentando llevar a cabo algo que es inalcanzable y por ende no se puede frenar, las descargas por Internet tienen cada vez más acogida en todo el mundo y por más campañas que se realicen va a ser casi imposible detener este fenómeno.
Son muchas las estrategias que se han usado para contrarrestar las descargas por las redes P2P, descargando contenido ilegal que está protegido por derechos de autor, ya que éstos ya tienen un dueño. Pasando desde insertar virus en las computadoras, que dañan los archivos MP3 que por lo general son los más usados en los formatos de música en la red, hasta dar una idea de exterminar un computador por completo por medio de un control remoto.
Una estrategia interesante fue la que utiliza Microsoft, se trata de lo siguiente; un agente secreto se hace pasar por cliente y le dice los vendedores de computadoras españoles que le compran un computador si le instalan Windows pirata. Esta estrategia parece un poco errada ya que trata de incitar al delito, pero a la vez estando éxito ya que el 42% de las personas aceptan.
Es inconcebible que a los usuarios que usan las redes de Internet como medio de comunicación o de contacto con el mundo se les prohíba descargar canciones que quiera escuchar o álbumes y películas, eso no significa que hay que estar de acuerdo con la piratería, lo que pasa es una cuestión de extremos, hay personas en la calle que venden discos piratas, eso significa que son fines lucrativos, pero una persona que realice descargas por Internet con fines meramente fanáticos hacia el artista, que quiera escuchar su música y no pretender ganar dinero no está haciendo más allá lo normal, las leyes y las campañas deberían ser contra ellos. El problema no es de dinero, muchas personas cuentan con suficiente dinero pero no encuentran gracia alguna para comprar discos originales, y prefieren hacerlo por medio del Internet. Además por medio de las campañas contra las descargas y con frases como “puedes hacer clic pero no te puedes esconder” pretenden acobardar al usuario y tratarlo de convencerlo de que no sigue realizando descargas, ya que esto le traería graves consecuencias. El problema es de costumbre, es mucho más fácil encontrar música en Internet que salir de la casa y dirigirse a una tienda de discos para adquirir CD o DVD, además con el desarrollo tecnológico se hace más fácil el desarrollo de esta actividad.
Las grandes empresas, califican este tipo de personas como delincuentes o piratas, para ellos es lo mismo que una persona descarga una canción de Internet a que se robe un reloj Cartier en un establecimiento público, y pretenden que se penalice la misma manera o peor.
Pero siendo realistas, como se darían a conocer los artistas que tienen éxito en este momento, el Internet es un gran medio para ello, aunque haya algunos de ellos que no lo reconozcan y crean que les afecta, su popularidad crece por medio de conocer sus canciones y la forma más común que se hace es por medio del Internet.